viernes, 27 de abril de 2007

REPORTAJE Y DOCUMENTACION: la noche de los teatros

PASEANDO ENTRE BAMBALINAS

El evento de “La noche de los Teatros”, celebrado el pasado 29 de marzo en Madrid, demostró a través de 81 actividades distintas que para nada se encuentra en crisis, tal como dijo el internacional Calixto Bieito.

La comunidad de Madrid ha decidido este año celebrar la I Noche de los Teatros, en la cual se reunió a un gran número de personas de este entorno para poder mostrarnos al resto dicho mundo. Así que, el 29 de marzo me dirigí yo rápidamente a la primera de las actividades que había incorporado a mi recorrido de esa tarde – noche para inspeccionar un poco en ese mundo. La plaza del Museo Reina Sofía se encontraba repleta de gente esperando para entrar en los conteiners, mientras tanto, unos cocineros preparaban salmorejo ante la mirada atónita del público… cómo atónitos salían de las diferentes casetas ya que los espectáculos “te hacían pensar” pues era todo “una protesta”.

Siguiendo el camino trazado llegué a la danza en la calle, donde la música surgía en medio de la multitud, agolpada para ver los movimientos acompasados de los bailarines quienes se encontraban presentando su nuevo proyecto Tirannha, músicos, contentos con el proyecto, aunque deseosos de que esto se convierta en algo más que una noche, que sea un fomentar continuo del teatro y la danza.

En cierto momento, el grupo con el que me encontraba, mientras yo me dirigía feliz hacia la siguiente actividad en mi recorrido, la gente con la que me encontraba decidió que tenía hambre, esto provocó que en medio segundo me viera arrastrada y apartada de mi camino.

-Pero ¿dónde queréis ir?- Pregunté, algo asustada, pues el tiempo siempre me parece escaso y no quería perderme la conferencia a la que prentedíamos acercarnos.

- Al Dunking Donuts- Contestó una voz. Así que decidí encabezar la marcha para ver si así conseguía dar algo de prisa al grupo. Por suerte el lugar seleccionado no se hallaba muy lejos de donde nos encontrábamos (ventajas de pasear por el centro de Madrid) pero para mi desgracia, hubo gente que decidió acercarse al Burguer King. Mientras yo me quedaba entre ambos grupos, el tiempo pasaba, yo me iba estresando y la gente no terminaba de aparecer. Finalmente, con poco más de 10 minutos para que fuera la hora, aparecieron y nos pusimos en camino, yo obviamente cogí rapidez para poder llegar a tiempo… Pero esto solo consiguió que las cosas empeoraran: perdimos a la mitad de la gente y comenzó el intento desesperado por localizarles. Llamada:

-¿Dónde estáis?- mi preocupación era latente.

-No te preocupes, enseguida llegamos- intentaban calmarme al otro lado del teléfono.

Cinco minutos después, otra llamada:

-Chicos, ¿os habéis perdido?... a ver a ver, cruza la calle, subes un poco, y debajo del globo blanco, ahí estamos.

Pero al parecer los intentos por explicar mi situación fueron en vano, no lograron encontrarnos. Así que, al cabo de un rato, viendo que ya entrábamos tarde en la conferencia, decidimos dejar a nuestros compañeros a su suerte, pues no entendíamos el porqué de su no llegada a nuestra localización.

La conferencia con Calixto Bieito dejó buen sabor de boca, un gran autor con ganas de innovar y de adentrase en las obras más allá de la primera impresión que provocan al leerlas. Su confianza en el teatro actual y sus ganas de que “el teatro español fuera más conocido internacionalmente”

A la salida, descubrí la localización de nuestros compañeros perdidos, que en aquel instante ya se encontraban en sus casas. Mientras tanto, en el Círculo de Bellas Artes, varios grupos de jóvenes actores competían con pequeñas obras, un grupo improvisaba en el teatro Albéniz a gusto de un público variado y Mónica Martínez impartía una clase para todo aquel que quisiese sentirse actor por un día. Mi noche de los teatros terminaba con muchas lecciones aprendidas en la cabeza pero sobre todo con la idea de comenzar a disfrutar mucho más del teatro.

Documentación:

La “Noche de los Teatros” se encuentra precedida por varias noches temáticas realizadas para acercar más a la gente diferentes actividades culturales. Esta iniciativa de noches culturales comenzó en París en 2002, su ejemplo fue seguido por Bruselas, Roma, Riga y Madrid. Antes de celebrar “La noche en blanco”, Madrid celebró la I Edición de dos noches temáticas: “La noche de los libros” celebrada el 20 de abril con motivo del día del libro; y “la noche de los museos”.

Esta primera noche de los teatros, organizada por la concejalía de Cultura y Deporte de la comunidad e Madrid, ha contado con la colaboración de 45 teatros, 103 autores, 110 directores, 148 compañías y 485 actores, que se dedicaron a demostrar su amor por el teatro en un período de 8 horas (de las 17 h. a la 1 h.) con diversas actividades como la música, la danza, la improvisación, la conferencia o la enseñanza intentando enseñar al público a disfrutar un poco más de ese mundo que es el teatro.

EVITAR LOS TÓPICOS: Declaración de amor

MAREA DE SENTIMIENTOS

Y qué si una vez más

Como dormida me siento

Y cansada lucho contra los vientos

Que intentan arrastrarme a tu puerto.

No importa lo que digan ni ocurra

Mientras yo sea consciente de que esta locura

Logrará deshacer mis sentidos

A cada momento que descubra

Que nunca vas a ser mío.

Y sé que me enfrento a los dioses,

La vida o el destino mismo,

Pero todo me es indiferente

Pues no luchar nunca fue mi estilo.

Y así me destruyo y construyo

Al mismo tiempo que te alejas y te acercas

Marea que eres de mi alma

Felicidad nunca del todo hallada.

Pero ¿qué puedo decirte a ti?

Nada puedo reprocharte y sin embargo…

Ansío gritarte todo lo que siento

Y sacar la rabia, furia, amor y miedo

Que me consume por dentro.

martes, 24 de abril de 2007

Movimiento

AVISO: esto es un spoiler de cruce de caminos así que cuidado, si de todas formas, alguien quiere leer tanto este escrito como el de "sin movimiento" que lea primero el otro xD

Ysabel comenzó a dirigirse hacia el castillo, la emoción hacía que solo deseara ir más rápido, pero sabía que no podía forzar más a su pobre Aura. Cuando se adentró en le bosque que la separaba del castillo, oyó un ruido seco a su espalda, se giró asustada temiendo que la guardia de su padre la hubiera encontrado. Para su sorpresa se encontró frente a un joven de pelo castaño y ojos brillantes, alto y delgado, que con un dedo sobre sus labios la invitaba a permanecer callada mientras bajaba de su yegua. Ysabel se sintió asombrada, pero algo en su interior la hizo confiar en él, lentamente, apoyó sus pies en el suelo. “¿Quien sois?” Preguntó en un susurro. “me llamo Jorge” respondió él mientras arrastraba a ambas hacia un lugar más escondido en la parte frondosa del bosque. Allí vio Ysabel las pertenencias del joven, esparcidas por el suelo, como si se hubiera levantado de un salto al oírla llegar. Ese pensamiento llenó de angustia la mente de Isabel pues pensó entonces que podría ser uno de los hombres de su padre, así que en un segundo de despiste, aprovechó para sacar su pequeño puñal y apuntarle al cuello “No seréis uno de los guardias de mi padre ¿verdad? Porque no pienso volver”, el joven, sin salir de su asombro, negó con la cabeza, lo que hizo que Ysabel se relajara y bajase el puñal, resoplando de alivio, sabiendo más que nunca que necesitaba llegar, cuanto antes, al castillo.

LENTITUD:sin movimiento

Jorge se sentó en el sueño, se encontraba cansado después de un día tan completo de viaje… Cerró los ojos y liberó sus sentidos: podía oír perfectamente el aire que acariciaba las hojas de los robes y nogales de su alrededor, grandes hojas que comenzaban a tornar sus colores, de un verde brillante a un amarillo apagado hasta terminar en un marrón casi rojizo, a lo lejos el sonido del arroyo cercano le trajo recuerdos de días felices, días con sus hermanos jugando en el río. De repente comenzó a soplar una suave brisa que le proporcionó una agradable sensación de fresco, ya que el sol comenzaba a calentar pese a encontrarse en los primeros días del otoño. Poco a poco su cuerpo se dejó llevar a otro mundo, fue arrastrado por a los brazos de Morfeo que le llevó a ese mundo en el cual no había persecuciones, ni tenía que huir, en el que podía pasarse días enteros en la misma ciudad disfrutando de todo, haciendo sus malabares, paseando o sencillamente quedarse sentado observando a la gente pasar, era un mundo de paz… Así estuvo, en medio de sueños imposibles, hasta que el ruido de unos cascos le hizo salir de su ensoñación y una oleada de pánico recorrió su cuerpo.